¿Qué es el Protocolo Social?

El Protocolo social se puede definir, como diría José Antonio de Urbina, como un ‘conjunto de costumbres, usos y reglas que, a tenor de los cambios en la sociedad, regulan el comportamiento y las relaciones humanas para mejorar la calidad y la eficacia de nuestra acción personal y, en último lugar, nuestra convivencia con los demás’ ¹.

Pero realmente, el protocolo social depende de las personas que estén a nuestro alrededor. Vale, hay unas reglas estándares para todos, una reglas que deberíamos conocer y eso podríamos llamarlo RESPETO Y EDUCACIÓN. Pero, en este post, no voy a hablar de ello. 

El Protocolo Social yo lo entiendo como las reglas que se utilizan en un determinado círculo social. Con esto me refiero, que si sueles ir a jugar golf, tendrás que conocer las reglas sociales que necesitas incluir en tu forma de ser para tener un comportamiento adecuado. Por ejemplo, qué ropa tienes que utilizar, qué manera es la correcta para presentarte a otras personas, cómo comportarse cuando ganas, o mejor dicho, cuando pierdes, las reglas en el campo de juego…

Luego, está el protocolo social que algunas personas entienden como la adaptación a cualquier situación, utilizando los encantos de su personalidad. Esa persona que da igual cual sea su círculo social que siempre actuará con las reglas de personalidad que el individuo entienda como correctas. Por ejemplo, preguntar el nombre al camarero cuando está en un bar, presentarse cuando llega a un networking con un buen apretón de manos o abrir la puerta a su vecinx. Da igual la situación o quién esté porque se va a comportar igual. El problema de esto es que en algunos círculos más snobs, este comportamiento lo pueden ver como grosero, sin modales…  por ejemplo, cuando dicen directamente lo que piensan, defienden al débil o no entienden las reglas de jerarquía o comportamiento social.

En próximos posts, te enseñaré cuáles son esas recomendaciones que considero importante incluirlas en tu personalidad para que nunca te sientas fuera de lugar.

1. El Gran Libro del Protocolo. Temas de hoy, 2005

LOS TRES YOES

¿Quién eres?

Definirse a uno mismo puede ser difícil, pero es importante preguntarte quién eres y cómo te ven los demás. Es una manera de mejorar unx mismx y crecer interiormente. Lo primero de todo te diré que hay diferentes yoes dentro de tu persona.

El YO que quieres ser y te propones ser cada vez que sales por la puerta.

Lo puedes identificar sabiendo qué te callas o qué dices cuando estás con más personas. Cómo te vistes, qué lees, qué comes, qué ocultas para que nadie piense nada malo de ti. Ese YO es la imagen que tú quieres proyectar y trabajas, a veces sin darte cuenta, para manifestar ese YO que quieres ser. 

Es tu modelo, tu rol, tu manera de ser porque quieres ser mejor, mejor que tú misma. Quieres ser una sonrisa en tus momentos mas débiles, quieres ser una luchadora cuando no tienes aliento o, simplemente, quieres ser misteriosa cuando lo único que necesitas gritarle al mundo lo que te pasa.

El YO que realmente eres, el que se muestra detrás de escena. 

Este es el que puede dar más miedo conocer o aceptar. No tengas miedo si encuentras cosas negativas (a tu parecer). Piensa que estás haciendo este ejercicio para conocerte. Este YO es el que se queda en una esquina, observándote, sin decir nada, pero que de repente aparece y te hace darte cuenta de lo tonta, de lo sensible, de lo enamoradiza, de lo valiente, de lo positiva que eres. 

Este es el YO que suele hablar contigo a solas en esas noches de melancolía o en esos momentos de triunfo. Es el que se mira al espejo y te dice: – no dudes tanto de ti, eres unx valiente.

El YO como te ven los demás.

Lo mejor para definir este YO es preguntar a tu familia, amigos, profesores, en definitiva, a la gente que está a tu alrededor. No tengas miedo a preguntar, pero sé fuerte si hay feedbacks negativos. Recuerda que tú has preguntado y ellos solo te ayudan a darte cuenta quién proyectas que eres. 

Este es el YO que te revela, el YO que te define delante de los demás. Este YO no tiene que ser el mismo que los anteriores pero, definitivamente, es como los demás te ven. En ocasiones, te señalan defectos que tu odias en otros (recuerda que si los ves en los demás, es porque puede ser que tú los tengas también, ¡AUTO-ANALÍZATE!)

En definitiva, cada uno de estos YOES son válidos.

No hay que tener miedo a auto-conocerse porque sabiendo quienes somos podemos mejorar en cualquier ámbito de nuestra vida. Recuerda que es importante saber quién eres y quién quieres llegar a ser. Tener una harmonía entre estos tres yoes, te dará paz, te dará felicidad, te dará autoestima. Lo hará porque aceptándonos a nosotros mismo como nuestro yo interior es, nos enseñará que podemos mostrarnos al mundo cómo somos, que no tenemos que fingir, que solo tenemos que ser. 

Más que una talla Estudio antropométrico

La asesoría de imagen no se limita a definir a las personas por sus medidas, una buena asesora de imagen hará que te conozcas tanto por dentro como por fuera, des valor a tus características más sensuales y bellas, potencies tus virtudes con tu saber estar, colores, prendas, maquillaje y peinado. Todas las personas somos bellas y no deberíamos olvidar que las tallas son números que nos llevan al deterioro de nuestra personalidad, muchas personas creerán que estoy definiendo a personas de tallas grandes pero de lo que mucha gente no es consciente es que en nuestra sociedad también hay personas que no se encuentran bien con su físico por ser excesivamente delgadas y no poder combatir la delgadez con dietas saludables. Lo importante es que seamos personas saludables por dentro y por fuera. Mimemos a nuestro cerebro y a nuestro cuerpo. Ahora vamos a definir qué tipo de siluetas existen para que conozcas más a tu cuerpo:

 

 

 

Triángulo: Característico en cuerpos dónde las caderas toman el protagonismo, hombros estrechos y pechos pequeños. Lo combatiremos dando volumen a la parte superior.

Triángulo invertido: Aquí el protagonismo lo tiene la espalda, al ser más ancha que las caderas, jugaremos con la parte inferior para equilibrar la silueta proporcionándole volumen.

Guitarra: Según los cánones de belleza esta silueta transmite sensualidad y equilibrio. Pechos y caderas amplios y proporcionados con cintura marcada. Para no perder la ventaja debemos de jugar con telas apropiadas que muestren tan perfecta silueta.

Oval: La zona central es la protagonista en este tipo de siluetas, lo que debemos crear es marcar cintura, hombros y caderas. Así dividimos a la figura y creamos proporcionalidad visualmente.

Reloj de arena: Este tipo de cuerpos se asemeja a la guitarra pero sus líneas son más rectas y el protagonismo lo tienen las caderas. Aunque hombros y pelvis tengan la misma longitud, el pecho será pequeño, la cintura bien definida y estimulará visualmente a apreciar las caderas más amplias. Deberemos jugar con telas y accesorios creando volumen en la zona pectoral, marcar caderas y suavizar las líneas.

Rectángulo: Al igual que la columna, no tiene definida la cintura pero la parte superior e inferior son más voluminosas, jugaremos con tejidos que proporcionen suavidad y marcaremos cintura.

Columna: Son siluetas que no tienen definida la cintura y la parte superior y la inferior se equiparan creando líneas rectas, por ello, lo que se debe de hacer es romper la silueta creando volumen en hombros y caderas y marcando cintura.

 

 

Si eres hombre y te preguntas cuál es el canon de belleza para ti, es el que te muestro aquí arriba. Las siluetas anteriores harán que encuentres la que se identifica con tu cuerpo, lo único que debes tener en cuenta es jugar con las prendas para visualmente crear hombros anchos y estrechez a la parte inferior, esto lo puedes conseguir, por ejemplo, con tejidos rígidos en chaquetas o cuellos que proporcionen amplitud, pronto te daré trucos!

Proporción del cuerpo

Más allá del canon de belleza que hoy día se presenta en nuestra sociedad y teniendo en cuenta que es variable entre épocas y culturas, definamos cuáles son las proporciones del cuerpo humano. Yo cogería las proporciones mejoradas de Policleto por Lisipo y proporcionaría el cuerpo en 7½ cabezas. Con ello, lo que apreciamos es que el inicio de los hombros coincide con nuestra pelvis de manera vertical, el codo coincide horizontalmente con nuestra cintura, nuestras muñecas con nuestro pubis y las manos finalizan en nuestros muslos, quedando de ésta manera:

 

Una vez llegado a ello, optemos por definir nuestra asimetría para poder jugar con la vestimenta y los accesorios y visualmente proyectar una imagen simétrica.